Por un decreto del gobernador, la provincia de Corrientes es "pro vida"

Lo anunció ayer Ricardo Colombi, tras un acuerdo con el arzobispo local, Andrés Stanovnik, presidente de la Pastoral Familiar. De este modo, el Estado laico asume la tutela efectiva y la protección de los derechos del "niño por nacer".

Por:
Lucia Alvarez

Por decreto y en respuesta al pedido de las iglesias Católica y Evangélica, la provincia de Corrientes deberá ser considerada desde hoy un distrito "pro vida", en el que se asume como "política de Estado", la defensa de la vida "desde el momento de la concepción". El gobernador Ricardo Colombi participó anoche de un acto por el "Año de la Vida", organizado por el arzobispado local y al que acudieron obispos de las tres diócesis correntinas, funcionarios, intendentes y legisladores provinciales. Allí Colombi dio a conocer el pronunciamiento oficial -que tiene fecha del 2 de diciembre- mediante el cual el Estado laico asume la tutela efectiva y la protección de los derechos del "niño por nacer". De este modo, la gobernación siguió los pasos de la Legislatura local y otros ocho municipios que ya habían sentado precedente, así como de las provincias de Salta y Chaco, que también se proclamaron "pro vida" por distintos medios.
"El gobierno participa como invitado y como colaborador. Es una respuesta al debate legislativo que se está dando en el Congreso Nacional, pero no tiene implicancias prácticas. Se trata de una proclama, de animarse a dar el paso y mostrar que es voluntad del gobierno defender la vida. Corrientes es muy tradicionalista y religiosa. El gobernador está interpretando lo que la mayoría del pueblo manifiesta", explicó un integrante de su gabinete a Tiempo Argentino.
Para llegar a ese decreto, la semana anterior, el arzobispo de la arquidiócesis de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik, asistió a la Casa de Gobierno para mantener una reunión protocolar con Colombi. En menos de una hora, ambos habían acordado posicionarse "a favor de la vida".
En el comunicado oficial de ese día, la gobernación recordó un dato que explica, de otro modo, la razón de esta alianza: el arzobispo Stanovnik preside en la actualidad la Pastoral Familiar del Consejo Episcopal Argentino, un área clave desde la cual la Iglesia Católica resiste los proyectos de legalización y despenalización del aborto.